La cuenta regresiva para que termine el “mandato” del "haiga sido como haiga sido" presidente, ha comenzado. Con un saldo de miles de muertos a causa de la necedad de este hombre que se empeño en mantener una guerra que la mayoría de los mexicanos desaprueba. Pero él no podía ponerle un alto, pues ¿cómo?, probablemente al término del “mandato” cuando al señor en alguna entrevista incomoda, por supuesto ésta no de alguna de las dos televisoras que dominan en México, se le cuestione sobre estas miles de muertes que deja su gobierno, contestará para zanjar la discusión y con una sonrisita en la boca con su famosa sentencia de “como dicen en mi pueblo haiga sido como haiga sido”. Cuya traducción sería más o menos "ya lo hice y qué".
Total, se sabe impune en este estado mexicano corrupto hasta los huesos, por eso lo vemos feliz subiéndose a los Go-kart, y haciendo chistes del candidato al que en 2006 le robaron la elección. Supongo que después de todo aún cree que tiene las manos limpias de que en algún momento habló y que lo de presidente del empleo fue solo una broma macabra con la cual encubría su deseo de terminar su mandato con la reforma laboral, obligando con ella a que la mayoría de los mexicanos necesiten tener más de un empleo para sobrevivir que, como lo hemos dicho antes, no es lo mismo que vivir dignamente.
Como decía, la cuenta regresiva a comenzado; desgraciadamente es regresiva en más de un sentido; lo es por el hombre que deja el cargo y lo es también por el hombre que tomará el cargo, el cual es solo la cara de un dinosaurio copetudo y relamido pero con los mismos colmillos afilados. Aquel que cree que México le pertenece, y regresa con más enjundia para terminar con lo que queda del país. Así pues, volverá al estado corrupto que él mismo creó y al que a la administración saliente poco le importó modificar.
Ante este panorama desolador, la única salida seguirá siendo la resistencia y la lucha constante por un cambio que busque una vida digna para todos los habitantes de este país. Ahora más que nunca tenemos que sumar nuestros esfuerzos y no darnos por vencidos.
Luisa Vallejo.
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