Estamos en pie de lucha.

“If you think you are too small to make a difference, try sleeping with a mosquito.”

“Si piensas que eres demasiado pequeño para hacer una diferencia, trata de dormir con un mosquito”

Dalai Lama XIV.

Mi país no está de luto, ni está agonizando, ni está derrotado, ni está perdido… está despertando, el fragor de su voz empieza apenas a resonar y ya se ven temblar las esferas delincuenciales encumbradas en las llamadas “instituciones” ¿Por qué lo digo? No es gratuito, hemos visto surgir en nuestro país un movimiento inédito, de miles de frentes, abanderado bajo miles de colores e ideologías, que hasta cierto punto, podrían, otrora percibirse como contrarias unas y otras, pero que han depuesto sus diferencias con el fin de la unidad nacional en persecución de un mismo objetivo; a las filas condenatorias del candidato Enrique Peña, se han sumado, incluso muchos panistas y priístas de hueso colorado, muchos de ellos, familiares y amigos de un servidor, con el afán irremisible de reprobar la imposición de un presidente que no corresponde con lo que pueblo dictó en las urnas. Mi país está en pie de lucha, más vivo que nunca, apoderándose de sus calles, de los medios que no están secuestrados por los “periodistas” mercenarios y prostitutos que se venden al mejor postor. La primavera mexicana florece todo con todo su esplendor, y como un Midas, torna en oro todo lo que toca, aunque allá afuera la persistencia de la lluvia estival pretenda deprimir nuestro corazón, la batalla va, pacífica y redentora.

Pero de eso trata todo esto, de resistir solos y juntos, de congratularnos por cimbrar desde los cimientos los pilares de los poderosos, debemos darnos cuenta, que la gente está despertando, está haciendo patente su enfado, su desilusión, pero sobre todo su indignación ante el atropello que pretende consumar el PAN gobierno, el “Nuevo” PRI de las viejas mañas, los empresarios sin escrúpulos, la delincuencia organizada, lo políticos perversos e indolentes cuya única intención es su propio beneficio a costillas de los demás. SORIANA está derrumbándose entre pérdidas millionarias, MONEX acaba de admitir hoy por la mañana que efectivamente enfrenta un proceso de fiscalización por la dudosa procedencia de los fondos que hubo manejado para el Partido Revolucionario Institucional, Ciro Gómez Leyva y su encuestadora de quinta perdieron a sus principales clientes (Televisa, uno de ellos) y el ambiente entre las esferas de poder se está tornando un caos, se percibe, una fragmentación rotunda y ataques entre quienes otrora compusieron un frente para llevar a Enrique Peña a los Pinos, y eso que el señor aún no es presidente oficial de ninguna cosa, a no ser que hablemos de su casa; sus principales apoyos, entre televisoras y políticos gobernantes se están desdiciendo y deslindándose de la figurilla de Enrique Peña ¿Por qué será?

En proporción inversa, las manifestaciones populares se hacen cada día más multitudinarias y rotundas, la gente, a diferencia de hace seis años, ya no se traga entero el cuento de las televisoras, tiene más reservas al repetir lo que escucha, las manifestaciones pro Peña desaparecieron por completo, casi por arte de magia, después del 1 de julio, obviamente porque ya no hay quien las patrocine a cambio de un monedero de Soriana o de mil quinientos pesos; cada día que pasa, brota de la cloaca un nuevo escándalo que desvirtúa – como debe ser- el falso triunfo de Peña Nieto, cómo diría mi abuelo, la cosa se está poniendo de a peso. ¿Pero por qué hago tanto hincapié en todos estos pequeños y grandes logros arraigados por la organización del pueblo? Los que hemos tenido la dicha de participar en cada una de las infinitas formas de movilización, nos hemos dado cuenta del clamor de la gente, de la vasta concurrencia en cada una de ellas, del esfuerzo, el empeño y la persistencia que pone cada ciudadano descontento y encabronado en contra de esta nueva farsa, que lo que ha surgido es cosa grande y nada deleznable y del silencio que guardan las televisoras, periódicos de circulación nacional, emisoras de radio y otros medios corporativos. Pero el movimiento es avasallante, el fraude y la imposición por sí mismas son ya bastante expuestas en medios de comunicación internacionales, Le Monde reza sobre el retorno de la dictadura perfecta al poder y se ve Enrique Peña en una posición desventurada que recuerda inquietantemente al saludo fascista hitleriano, la televisión argentina habla del fraude y del triunfo del señor telenovela, diarios de Alemania, Francia, Japón, España, Inglaterra, Estados Unidos, Brasil y muchos otros países ponen en tela de juicio la legitimidad de la elección presidencial. Es humillante la percepción que existe a nivel internacional sobre nuestro país, y más vergonzante es que un monigote salga a dar entrevistas sin hablar ni j de inglés –que eso no es lo malo- si no que pretenda asumir que lo sabe, y que además, según el lo sabe “muy bien”, y que en en español la cosa no sea distinta en absoluto, pues el señor, tampoco es capaz de dar una entrevista en su lengua madre, no es capaz de razonar ni de responder por sus propios medios, porque le dictan al pié de la letra lo que debe responder a cada pregunta porque su gente sabe que se va de lengua y el solito se abolla la robada corona…

Para mi es importante destacar todo este tipo de cosas, por aquellos colegas que pierden la brújula y reconsideran si el peso de sus acciones en realidad causará mella en esta rotunda imposición industriosa y gigantesca… pero estamos en pié de lucha… Y a los que aun tengan sus reservas el ello recuerden el pasaje bíblico de David y Goliat. 

Murdoc